Curso de «memoria democrática» acelerado

Repasando fotos de los muchos lugares de la GCE en los que he estado (y los muchos que me quedan, Dm) encontré esta foto de Paracuellos y me vienen a la mente unas reflexiones que comparto:
Creo que cuando te acercas al estudio de la Guerra Civil y empiezas a tener datos, dejando al margen los sesgos ideológicos, te das cuenta de que no hubo malos y buenos, sino que hubo gente buena y gente mala en los dos bandos. Asimismo, que levante la mano alguna familia en el que todos sus miembros estuvieran todos en el mismo bando. Es una pena este sesgo tan ideologizado que se está dando actualmente.
Hay que conocer la historia para que no se repita, por eso no se debe dejar a los nietos y bisnietos de los combatientes que inflamen la situación. Por desgracia, la mayoría de ellos tiene pésima e ideologizada información. Hay que seguir haciendo esfuerzos pedagógicos.

Independientemente de ese esfuerzo pedagógico, recomendaría que se fijasen en los combatientes, que se perdonaron por el terrible suceso y en los hijos de los combatientes que entendimos que era algo a conocer desde el estudio y mirar hacia adelante, a hacer una España próspera para todos. Nadie preguntaba tus padres de qué bando eran.
En conclusión, la historia de la Guerra Civil Española, y en particular eventos como los de Paracuellos, nos recuerdan que el pasado es a menudo más matizado de lo que los relatos ideológicos pueden sugerir. Reconocer que hubo tanto bondad como maldad en ambos bandos, y entender la división que atravesó incluso a las familias, es esencial para construir unas bases democráticas sólida y equitativas.
Al dejar de lado las narrativas polarizadas y enfocarnos en el perdón y el aprendizaje colectivo, podemos aspirar a un futuro en el que la historia sirva no para dividirnos, sino para unirnos en la construcción de una España próspera y armoniosa para todos.
De esta manera, honramos no solo a aquellos que vivieron durante aquellos tiempos turbulentos, sino también a las generaciones futuras, asegurándonos de que los errores del pasado no se repitan y que los éxitos sean el fundamento de nuestro mañana.

Be the first to comment

Leave a Reply

Your email address will not be published.


*